Cuando un potencial cliente se pone en contacto con un traductor solicitando un presupuesto, detrás se escucha: “Quiero ser tu cliente”, y comienza un extenso proceso -que la mayoría desconoce- hasta que la traducción finalmente se entrega.
Análisis de proyecto
En ese primer momento, el traductor necesita conocer algunos datos para evaluar si puede o no hacerse cargo del trabajo, como, por ejemplo:
- En qué idioma está escrito el texto y a qué idioma necesita el cliente que se traduzca.
- Qué tipo de texto es (una página web, un certificado, una novela, un cv, una carta, un catálogo, etc.).
- Cuál es la temática y la extensión del documento.
- En qué plazo lo necesita.
Y en este último punto es en el que detrás se escucha: “¡Quiero la traducción para mañana!”. Es por eso que debemos educar a nuestros clientes, pero más que nada concientizarlos del proceso y de la importancia que acarrea realizar un trabajo de traducción.
Una vez que el traductor cuenta ya con todos los detalles, analizará todo ello y decidirá si acepta o no realizar el trabajo. Si lo hace, tendrá que preparar un presupuesto para lo que, por lo general, necesitará los textos que vayan a traducirse. Esto es de suma importancia porque a veces el cliente explica que se trata de un documento de cuatro carillas, pero resulta ser que la letra es pequeña, se trata de un tamaño de hoja oficio y casi no tiene espaciado, o, por el contrario, nos dice que tiene 10 hojas, pero la mitad del contenido son gráficos, fotografías y tablas. Todo debe ser evaluado para poder cotizar de una manera justa y establecer una fecha de entrega acorde, tanto para el cliente como para el traductor. Por ello, es de suma importancia solicitar el documento digitalizado que se necesita traducir y poder evaluarlo uno mismo.
Una vez aceptados el presupuesto y el plazo propuesto, el cliente deja en manos del traductor el resto del proceso.
En principio, el traductor hará un análisis del texto al que se enfrenta: tipo de archivos, tema, vocabulario específico, estilo, etc. y tomará una serie de decisiones organizativas. Pensará si necesita algún software específico, si debe someter los archivos a algún tipo de conversión o edición antes de empezar a trabajar, preparará un horario o calendario de trabajo, etc.
Si bien cada proyecto de traducción es único, la metodología de organización puede ser la misma. Una buena organización es sinónimo de éxito.
Desarrollo de la traducción
Una vez superada la fase de análisis comenzará el proceso de traducción propiamente dicho, que se mezclará en ocasiones con el proceso de documentación o búsqueda de información y textos sobre la temática correspondiente. La velocidad y el plazo de este proceso depende de muchos factores. Ocurrirá muchas veces que, a pesar de haber evaluado el texto a la hora de presupuestar, el traductor termine “corriendo un poco” para cumplir con los plazos prometidos. ¿Gajes del oficio?… tal vez ….
Una vez terminado el trabajo de traducción es recomendable que el texto traducido sea revisado. Lo ideal sería que alguien comparara el original con la traducción, y que otra persona revisara el texto final sin conocer el original para asegurarse de que suena completamente natural. Esa es verdaderamente la forma de comprobar que los resultados sean tan buenos como esperábamos. Si suena bien en el idioma de destino, quiere decir que hemos realizado un trabajo de alta calidad. En ocasiones, por razones de presupuesto y de plazos, no se llevan a cabo tantas fases de revisión, aunque lo más recomendable es darle prioridad a este aspecto.
Post-producción
Pero en este momento el trabajo aún no ha terminado. El cliente podrá solicitarle al traductor las aclaraciones que considere necesarias, y este último seguramente brindará explicaciones fundamentadas, comentando además por qué ha tomado una y otra decisión en materia de terminología y criterios de interpretación. Por cierto, el cliente debe tener cuidado a la hora de publicar la traducción y no debe mencionar el nombre del traductor si ha hecho cualquier cambio sobre el texto.
Conocer el proceso de traducción ha ayudado muchas veces a que los clientes comprendan los plazos, es decir, por qué la traducción toma el tiempo que toma. Esperamos que este artículo haya sido de utilidad para comprender el trabajo que hacemos los traductores tras bambalinas para producir un texto profesional y de calidad.
El equipo de Translatios